Durante este periodo sin tus brazos
he delineado estelas sobre el recuerdo,
¡Rastreando vestigios de tus pasos
en los itinerarios recónditos del viento
vaciándome en mi propio llanto
suspirando de tu boca bosquejos
zarandeándome en las congojas de mis espasmos
y escurriendo de estos labios la savia de tu beso!
Durante esos momentos de hiel y agravio
enloquecí en la vehemencia de este sentimiento,
¡Son tantos los anhelos extasiados
que tu asfixia rezuma sobre mi pecho
porque te quiero, porque te amo,
porque soy vagabunda doliente de tu lecho
en cada crepúsculo ahora solitario,
en cada aurora que se enhebra sobre mi cuerpo!
Y es que el corazón no entiende de tiempos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario