Contigo

Quiero penetrar el orificio de tus antojos,
la hendidura sustanciosa de la batalla de tu manos,
los boscajes tentadores de esos dedos caprichosos
que elevan sudores de lascivia sobre las vertientes de mis páramos.

Quiero el perfume y el salitre de tu orgasmo,
el grito de los ronquidos ahogados en mis nalgas,
las pupilas dilatadas de placeres y sarcasmos
sobre la huella de tu cuerpo tras otra marejada.

Quiero las humedades de los gemidos,
los besos entumidos en los aledaños de tu garganta,
las espinas de rosales resecos y coloridos,
la saliva pretenciosa que resbala sobre mis aguas.

Quiero las caricias muertas y las que engrendas en tu abrigo,
¡Los caminos transitados y los parajes desconocidos,
las hojas nuevas de árboles floridos,
los sueños rotos en el diván de lo vivido,
la mueca irónica y el compás de tu delirio,
el halo indulgente y amargo de versos arrítmicos!

Lo quiero todo...
Pero contigo.