Sintiéndote en mi interior
adherido a los pálpitos de este corazón
sumergido en los anhelos de pétalos sin flor
que miran sin ver su color,
que escuchan sin oír su clamor,
que esperan más allá del dolor,
que sonríen sobre el eco de tu voz,
que sueñan en la cúspide al margen de la razón
entre pasiones celestiales y deseos de fusión.
Así, ¡así es el amor!
Paraíso de sonrisas y albergue de dolor,
¡manantial de éxtasis y bálsamo sanador
codiciado hechizo de arideces y sinsabor
envolvente brisa caprichosa en su fragor
que aprisiona tirana hasta al más triste gorrión
para cautivarlo entre la danza de una alegórica canción!
Y así...¡así es el amor!
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